En un giro clave dentro de las investigaciones por el homicidio de empresarios campechanos, las autoridades detuvieron a Cristo Marco “N”, un sujeto de 35 años originario de Quintana Roo, quien presuntamente participó en la desaparición y asesinato de Osberth Nicolás Valle Pinzón y su chofer Fernando Hermosillo Curiel, ocurridos en abril de este año.
El caso que sacudió a Campeche y Quintana Roo
El 10 de abril, Osberth Nicolás, de 41 años y propietario de la empresa “Osberth Valle”, fue visto por última vez junto a su chofer Fernando, de 29 años, en el poblado de Kantunilkín, Lázaro Cárdenas, mientras realizaban actividades comerciales. Ambos, originarios de Campeche, nunca regresaron.
El homicidio de empresarios campechanos generó alarma en el sector empresarial y familiar de ambas víctimas, que exigieron respuestas inmediatas.
Hallazgo y horror: cuerpos dentro de bolsas negras
Tres semanas después de su desaparición, el 21 de abril, los cuerpos de las víctimas fueron localizados dentro de bolsas negras en un área de maleza en Leona Vicario, municipio de Puerto Morelos. El hallazgo fue realizado por elementos de la Fiscalía General del Estado con apoyo de fuerzas federales, tras una intensa labor de rastreo.
Las investigaciones apuntan a que Cristo Marco “N” habría desempeñado labores de vigilancia o “halconeo” para un grupo delictivo que opera en la zona, y que estuvo siguiendo los movimientos de los empresarios antes de su desaparición.
Presunto vínculo con crimen organizado
Según la información obtenida por las autoridades, el detenido está vinculado a actividades de narcomenudeo y extorsión en la región norte de Quintana Roo, especialmente en Kantunilkín, donde se perdió contacto con las víctimas.
Gracias a los elementos de prueba reunidos, un juez de control emitió una orden de aprehensión, la cual fue ejecutada el pasado 11 de julio. El acusado ya fue presentado ante la autoridad judicial, que determinará su situación legal en los próximos días.