La fuente QR informa que el presidente Donald Trump pone fin a la guerra. Este 23 de junio de 2025 es el fin de la guerra entre Israel e Irán, tras mediar en un acuerdo de alto el fuego.

Trump anuncia el cese del conflicto en Medio Oriente
Durante una conferencia en Florida, Trump declaró que había conseguido “una tregua total” entre ambas potencias, la cual se ejecutaría en un periodo de 24 horas. Aseguró que Irán comenzaría deteniendo sus ataques primero, seguido por Israel.
El acuerdo fue respaldado por Qatar como mediador regional. Sin embargo, es una afirmación que todavía no ha sido confirmada por los gobiernos de Irán o Israel. En el mismo mensaje, Trump agradeció a ambas partes su disposición para evitar una catástrofe mayor.
Reacciones mixtas: ¿fin real o promesa electoral?
Aunque los mercados financieros celebraron la noticia (el petróleo bajó y el S&P 500 subió), la comunidad internacional ha mostrado cautela. Algunos medios reportaron que los ataques continuaron en la frontera sur de Israel e incluso se lanzaron misiles hacia bases estadounidenses en Qatar horas después del anuncio.
El fin de la guerra de los 12 días fue tendencia mundial, analistas consideran que la tregua aún es frágil y podría tratarse de una jugada política de cara a las elecciones presidenciales en EE.UU.
Qatar, el mediador silencioso detrás del acuerdo
El papel de Qatar fue fundamental para destrabar las tensiones. Fuentes diplomáticas indicaron que el emir qatarí sostuvo llamadas individuales con representantes iraníes e israelíes, coordinando junto con emisarios de Trump el momento y contenido del anuncio.
Este modelo de diplomacia exprés podría servir como referente para futuros conflictos, aunque todavía hay incertidumbre sobre su sostenibilidad a largo plazo.
Irán y la ONU mantienen reservas
A pesar del anuncio, el gobierno iraní no ha confirmado el acuerdo. Funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores señalaron que no hay un compromiso formal hasta que Israel detenga completamente sus ofensivas.
La ONU, por su parte, no ha emitido una postura clara, aunque ha reconocido estar monitoreando la situación “minuto a minuto”. El escepticismo internacional sigue creciendo.