Tras un cierre de año exitoso, los pequeños hoteles prevén una disminución en la afluencia turística y esperan recuperación hacia febrero.
La Riviera Maya concluyó el 2024 con cifras alentadoras en ocupación hotelera, alcanzando niveles superiores al 95% en los días finales del año. Sin embargo, los pequeños hoteles de la región anticipan una baja en la afluencia a partir del 3 de enero, con la expectativa de estabilizarse nuevamente en febrero.
Ofner Arjona, presidente de Pequeños Hoteles de Playa del Carmen, señaló que la dinámica turística para este año estará marcada por fluctuaciones en la ocupación, e hizo un llamado a regularizar el mercado de rentas vacacionales como una medida para garantizar estabilidad en el sector.
“A partir del 3 o 4 de enero comienza a bajar un poco la ocupación, y esperamos que a partir de febrero vuelva a subir, alcanzando aproximadamente un 85%”, comentó Arjona.
Resultados positivos para pequeños hoteles en fin de año
El cierre del 2024 fue favorable para los pequeños hoteles, en su mayoría operando bajo el esquema de plan europeo, con una ocupación promedio del 90% durante las celebraciones de Año Nuevo. Durante la semana de Navidad, este segmento alcanzó un 80% de ocupación con tarifas consideradas saludables.
Según datos del Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo, la Riviera Maya alcanzó una ocupación hotelera del 95.3% el 31 de diciembre, lo que representó un récord en la disponibilidad de los 57,108 cuartos de hotel en el destino. En comparación, el 1 de enero de 2024 se había registrado una ocupación del 92.2%, con 56,380 cuartos disponibles en esa ocasión.
El mes de diciembre cerró con una ocupación general del 82.8%, destacando picos superiores al 90% en los últimos días del año. El nivel más bajo se registró el 2 de diciembre, con una ocupación del 77.9%.
Expectativas para los próximos meses
De acuerdo con Arjona, los pequeños hoteles esperan que la ocupación mantenga cifras sólidas entre enero y abril, coincidiendo con el inicio de la Semana Santa, cuando tradicionalmente se registran altos niveles de afluencia turística.
Adicionalmente, existe preocupación por la posible llegada de sargazo, fenómeno que afectó significativamente a la región hace dos años. No obstante, los operadores turísticos confían en que este año no se repita un episodio similar y que el sector pueda mantener un crecimiento estable.
En el contexto de estas expectativas, el llamado a regularizar las rentas vacacionales busca fortalecer las condiciones del mercado y asegurar beneficios equitativos para todos los actores en la industria turística de la Riviera Maya.
