Tras la entrega de 29 líderes del narcotráfico a Estados Unidos, incluida la de Rafael Caro Quintero, la presidenta Claudia Sheinbaum evitó pronunciarse al respecto, pero aprovechó para cuestionar la corrupción en el Poder Judicial mexicano.
Luego de que su gobierno extraditara a 29 capos del narcotráfico a Estados Unidos, entre ellos a Rafael Caro Quintero, la presidenta Claudia Sheinbaum optó por no emitir una declaración directa sobre el tema. Sin embargo, durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional, aprovechó la oportunidad para criticar duramente al Poder Judicial mexicano.
“La corrupción del Poder Judicial en nuestro país es aberrante y ofensiva, qué bueno que el pueblo de México tomó la decisión de cambiar de raíz el Poder Judicial, es una bendición para México lo que vamos a vivir este año de elegir a los jueces, magistrados y ministros y que el pueblo pueda salvar al Poder Judicial de esta ofensiva corrupción para el pueblo”, declaró Sheinbaum.
A pesar de la importancia del acontecimiento, que incluyó la entrega de altos mandos de diversos cárteles del crimen organizado, Sheinbaum no hizo comentarios específicos sobre las extradiciones. En su lugar, informó que el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, y el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, ofrecerán una conferencia de prensa para brindar detalles sobre el proceso y los implicados.
El gobierno federal dio a conocer ayer el listado completo de las personas extraditadas y los destinos en Estados Unidos a los que fueron enviados. Los 29 capos fueron trasladados desde diferentes Centros Federales de Reinserción Social en México hacia el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), desde donde partieron a varias ciudades estadounidenses, incluyendo Chicago, Houston, McKinney (Texas), Nueva York, Phoenix, San Antonio, Washington y White Plains (Nueva York).

Entre los extraditados se encuentran líderes y operadores de alto nivel de diversos cárteles del narcotráfico. Por ejemplo, en Chicago, Illinois, fueron entregados José Ángel Canobbio Inzunza, alias “El Güerito”, perteneciente al grupo “Los Chimales”, y Norberto Valencia González, alias “Socialitos”, quien fungía como operador financiero del Cártel de los Beltrán Leyva.
El traslado de estos capos representa un golpe significativo para las estructuras criminales en México, aunque las autoridades no han revelado detalles sobre las investigaciones que llevaron a las detenciones ni sobre las posibles repercusiones en el panorama del narcotráfico en el país.
La decisión de Claudia Sheinbaum de no referirse específicamente a las extradiciones, pero sí de centrar su discurso en la corrupción del Poder Judicial, ha generado diversas reacciones en el ámbito político y social. Mientras algunos consideran que evadió el tema central, otros interpretan su postura como un intento de vincular el combate al crimen organizado con la reforma judicial que ha promovido su gobierno.
El proceso de extradición y las acusaciones contra los líderes criminales ahora quedarán en manos de la justicia estadounidense, mientras que en México continúa el debate sobre el papel del Poder Judicial y la lucha contra la corrupción.