Este lunes, más de 24 millones de alumnos de educación básica vuelven a las aulas en todo México. Mientras tanto, en la Ciudad de México, la Secretaría de Seguridad Ciudadana despliega un amplio operativo para garantizar la seguridad vial y el orden en las cercanías de las escuelas.
Este lunes marca el comienzo del ciclo escolar 2024-2025, según el calendario de la Secretaría de Educación Pública (SEP), con el retorno a las aulas de millones de estudiantes de educación básica en todo el país. En total, más de 24 millones de niños y jóvenes de preescolar, primaria y secundaria retomarán sus estudios tras las vacaciones de verano.
En la Ciudad de México, la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) ha desplegado un dispositivo especial que involucra a más de 13 mil oficiales. Desde las 6:00 de la mañana, estos elementos estarán supervisando el tránsito y las zonas aledañas a las escuelas para garantizar el flujo vehicular y evitar congestionamientos en las 16 alcaldías de la capital.
Este operativo de seguridad incluye patrullajes intensificados y la presencia de agentes de tránsito en los principales cruces de la ciudad. Para ello, cuentan con el apoyo de mil 427 vehículos oficiales, 47 motocicletas, cinco grúas, 12 ambulancias y 10 motoambulancias del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM). Además, un helicóptero del grupo Cóndores realizará sobrevuelos de prevención y vigilancia.
El ciclo escolar que inicia este 26 de agosto se extenderá hasta el 16 de julio de 2025, comprendiendo 190 días efectivos de clases en todas las entidades del país. Sin embargo, en algunas zonas, el regreso a las aulas no será inmediato. Por ejemplo, en el Estado de México, el retorno se ha pospuesto hasta el 9 de septiembre en 22 escuelas de Chalco, debido a las afectaciones provocadas por las lluvias, lo que afecta a más de 5 mil 200 estudiantes.
En otras regiones, como Michoacán y Baja California, la vuelta a clases también enfrenta retos debido a disputas laborales con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), lo que podría complicar la reanudación de las actividades escolares en algunas instituciones.
Desafíos de la inflación y la compra de útiles escolares
A pesar del inicio del ciclo escolar, la inflación ha sido un tema preocupante para muchas familias. Aunque México registró en julio la inflación más alta en 14 meses, con un 5.57%, el sector de educación fue uno de los más afectados, con un aumento del 6.37% en los costos. Sin embargo, algunos comerciantes y familias aseguran haber vencido la inflación en la compra de útiles escolares.
Edgar Jiménez, dueño de una papelería en la Ciudad de México, comentó que este año ha habido una gran oferta de marcas en el mercado, lo que ha resultado en una baja en los precios de los útiles escolares. Según Jiménez, los precios han disminuido entre un 20% y un 30% respecto al ciclo escolar anterior debido a la competencia entre marcas, incluidas muchas de origen chino. No obstante, también señaló que esta mayor oferta no se ha traducido en un aumento significativo en las ventas.
Algunas familias han optado por comprar únicamente lo esencial o han recurrido al mercado de útiles de segunda mano, una opción que ha ganado popularidad en los últimos años. Cris, una madre de familia, señaló que no ha visto una gran diferencia en los precios de un año a otro, pero que sí han aumentado en comparación con el mes anterior. Carlos Sánchez, propietario de una papelería en el Centro Histórico de la Ciudad de México, mencionó que las ventas han sido buenas, en parte gracias a las becas que ofrece la Ciudad de México a estudiantes de escuelas públicas.
El llamado de la iglesia a fortalecer valores
En este contexto de inicio de clases, la Iglesia católica en México ha hecho un llamado a través de su semanario “Desde la Fe” para que este nuevo ciclo escolar sea una oportunidad para fortalecer los valores entre los estudiantes. La iglesia subrayó la importancia de erradicar la violencia, fomentar el respeto al prójimo y reforzar la identidad cultural de los alumnos.
Además, se destacó la necesidad de una educación integral que incluya aspectos como la salud mental y emocional de los estudiantes, así como un compromiso más fuerte con el cuidado del medio ambiente. Este decálogo de valores busca guiar a los estudiantes no solo en su desarrollo académico, sino también en su formación personal y social, en un contexto educativo que enfrenta múltiples desafíos.