El peso mexicano continuó su caída este martes, desafiando brevemente la barrera de 18 unidades por dólar, debido a las preocupaciones de los inversionistas sobre posibles reformas constitucionales profundas durante el gobierno de Claudia Sheinbaum.

El peso mexicano extendió las fuertes pérdidas registradas en la jornada anterior, cotizando en 17.9415 unidades por dólar, lo que representa una depreciación del 1.5% frente al precio de referencia de Reuters del lunes. Más temprano, la moneda llegó a debilitarse hasta los 18.2010 pesos por dólar, un nivel que no se veía desde octubre de 2023. En las últimas dos sesiones, la moneda mexicana ha acumulado una pérdida del 5.6%.

El nerviosismo en los mercados se debe a la percepción de los inversionistas de que una mayoría calificada del oficialismo en el próximo Congreso podría traer profundas reformas constitucionales bajo la administración de la presidenta electa Claudia Sheinbaum. “Sigue el miedo”, afirmó Gabriela Siller, directora de análisis de Banco Base.

El peso, que había mostrado un sólido desempeño frente al dólar en los últimos meses, experimentó el lunes una caída del 4%, su peor jornada desde el inicio de la pandemia. Esta depreciación se produjo tras la contundente victoria de Claudia Sheinbaum en las elecciones presidenciales del domingo y la expectativa de que su partido, Morena, y sus aliados, dominarán el Congreso.

En la tarde del lunes, la presidenta electa anunció que el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, aceptó continuar en su cargo durante su gestión, que comenzará en octubre. Está previsto que a las 7:00 horas locales el funcionario envíe un mensaje a los mercados financieros.

Sin embargo, la analista Gabriela Siller informó en su cuenta de X que la conferencia con inversionistas concluyó esta mañana sin que el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) se pronunciara. Este silencio aumentó la incertidumbre en los mercados.

El lunes, la moneda nacional se depreció un 4.36%, pasando de 16.97 pesos por dólar a 17.71, según datos oficiales del Banco de México (Banxico). Esta caída se atribuye al nerviosismo en los mercados provocado por la victoria de Claudia Sheinbaum y las implicaciones políticas de su mandato.

La situación refleja la inquietud de los inversionistas ante posibles cambios en el marco constitucional y económico del país, lo que ha provocado una volatilidad significativa en la moneda mexicana. La continuidad en el cargo del secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, podría ser un intento de estabilizar la situación, aunque su silencio tras la conferencia de esta mañana no ayudó a calmar los ánimos.

El futuro del peso mexicano dependerá en gran medida de las políticas que implemente la nueva administración y de la capacidad del gobierno para generar confianza en los mercados financieros. Mientras tanto, los inversionistas y analistas seguirán observando de cerca los desarrollos políticos y económicos en México.