El sector náutico de Quintana Roo está pendiente de la aprobación de Protección Civil para establecer una rampa eventual que facilite el retiro de embarcaciones en caso de fenómenos hidrometeorológicos.
El sector náutico de Quintana Roo se encuentra a la espera de la autorización por parte de Protección Civil para la instalación de una rampa temporal, que permitirá sacar del agua las embarcaciones en caso de un impacto hidrometeorológico, como una medida preventiva esencial.
Ricardo Muleiro, director de los Asociados Náuticos de Quintana Roo, mencionó que se prevé que la rampa se ubique en playa Del Niño, ya que la rampa originalmente establecida por el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) en Malecón Tajamar, ahora está ocupada por el proyecto del puente Nichupté.
“Estamos a la espera de que se nos indique qué alternativa tenemos para una rampa eventual, que creemos que sería en Puerto Juárez, para el caso de ser necesario utilizarla”, agregó Muleiro.
El director recordó que el sector ha planteado la necesidad de contar con una rampa en la ciudad, debido a los conflictos que surgen al realizar estas maniobras en la zona hotelera, ya que suelen colapsar una de las vías principales. No obstante, destacó que durante los últimos fenómenos hidrometeorológicos, la rampa en Tajamar se utilizó sin mayores problemas.
Muleiro también detalló que existe un proyecto en colaboración con las autoridades municipales, esperando que se concrete en esta o la próxima administración.
La temporada de huracanes para 2024 se anticipa más activa que en años anteriores, con un número considerable de formaciones previstas. Por ello, el sector náutico trabaja en medidas preventivas para evitar situaciones de riesgo.
Además, el sector continúa esforzándose por obtener un seguro para los muelles. Este tema se discutió con el gobierno del estado, que actualmente cuenta con una póliza para su infraestructura aeroportuaria.
“Hemos avanzado y tendremos una reunión con la aseguradora. Esto es positivo y esperamos concretar una póliza que nos permita recuperarnos rápidamente en caso de un impacto”, concluyó Muleiro.
Este enfoque proactivo subraya la importancia de estar preparados ante las posibles amenazas climáticas, protegiendo tanto a las embarcaciones como a las infraestructuras náuticas de Quintana Roo.