Yolanda Sánchez Figueroa, alcaldesa de Cotija, fue atacada a tiros en la calle Javier Mina, cerca de la plaza principal del municipio, tras salir de un gimnasio, resultando gravemente herida y posteriormente falleciendo en el hospital.
Yolanda Sánchez Figueroa, la alcaldesa de Cotija, Michoacán, sufrió un ataque armado mientras caminaba por la calle Javier Mina, en las proximidades de la plaza principal del municipio. El incidente ocurrió después de que la alcaldesa saliera de un gimnasio, y fue perpetrado por civiles armados que dispararon desde una camioneta en movimiento.
El ataque dejó gravemente heridos a Sánchez Figueroa y a uno de sus escoltas. A pesar de ser trasladada de inmediato a un hospital en el municipio de Los Reyes, la alcaldesa sucumbió a las heridas causadas por los disparos. Su escolta, quien también resultó herido en el ataque, está recibiendo atención médica.
Este trágico evento se suma a un historial de violencia contra la alcaldesa, quien ya había sido víctima de un secuestro en el estado de Jalisco hace unos meses. En aquella ocasión, Sánchez Figueroa fue secuestrada tras visitar la Plaza Andares en Zapopan. Lo que inicialmente parecía ser un robo se convirtió en un secuestro cuando sujetos desconocidos la forzaron a subir a un vehículo. La alcaldesa fue llevada a una casa de seguridad, donde fue sometida a amenazas y demandas similares a las recibidas tras el violento ataque contra la presidencia municipal de Cotija meses antes.
Durante su cautiverio, las autoridades de Jalisco y Michoacán trabajaron de manera conjunta para localizarla. Finalmente, Yolanda Sánchez fue liberada tras ser hallada en un autobús proveniente de Mazamitla, en la autopista Jiquilpan-Sahuayo. Aunque físicamente ilesa, la alcaldesa admitió que el secuestro dejó secuelas emocionales. Posteriormente, la Fiscalía de Jalisco anunció la detención de los presuntos responsables del secuestro.
El gobierno de Michoacán ha condenado enérgicamente el reciente ataque contra Sánchez Figueroa. La Secretaría de Seguridad Pública del Estado informó que se ha desplegado un operativo en la zona para responder a este acto de violencia y buscar a los responsables. Este incidente resalta una vez más los riesgos y desafíos que enfrentan los funcionarios públicos en ciertas regiones del país, donde la violencia y la inseguridad siguen siendo problemas graves.
El asesinato de Yolanda Sánchez Figueroa es una trágica pérdida para la comunidad de Cotija y para todos aquellos que la conocían y respetaban. Su muerte subraya la urgente necesidad de mejorar las condiciones de seguridad y protección para los servidores públicos en México.
